De este modo surge un nuevo abordaje terapéutico: la Psicodanza Integrativa. Ella sostiene que es posible que a través de la danza, la música y en el seno del grupo, las personas pueden disolver bloqueos energéticos donde se encuentran sobre todo miedos que se manifiestan en somatizaciones y en trastornos psíquicos como estados de angustia y depresión.
Con la integración de la terapia individual, el alumno, aclara y decodifica las creencias antiguas, que atrasan su proceso de individuación y estos dos abordajes paralelos, la sesión individual y grupal potencia y actualiza el desarrollo del autoconocimiento de sí mismo.
A partir de esta toma de conciencia decido aglutinar toda la heterogeneidad acumulada para crear un concepto unívoco:
Psicodanza Integrativa
El objetivo consiste en impulsar el desarrollo y crecimiento del participante para que se oriente hacia una mayor cognición de sí mismo. Desde la toma de consciencia de su personalidad, se integre a otras dimensiones superiores de autoconocimiento, evolucionando hacia el ser espiritual, hacia la vivencia de Unidad.
Al lograr avanzar en la comprensión de nuestra naturaleza personal, que es la manifestación material de lo que somos, potenciamos su transparencia y flexibilidad para cumplir con su finalidad: ser vehículo del alma, la cual está al servicio de una realidad mayor a lo largo de la existencia.
He dado forma a la Psicodanza Integrativa desde mi propia experiencia de vida, con mi recorrido en la Biodanza y la vivencia espiritual. A partir de mi caminar constante hacia la búsqueda de transformación, consolidando una consciencia superior junto a muchas personas que han experimentado esta transformación en sus vidas en todos estos años de trabajo.
Una terapia vivencial vincular
La Psicodanza Integrativa trabaja en una línea de intervención terapéutica basada en la vivencia y el círculo de palabra. Se denomina Integrativa porque propone, en su dinámica, la integración del individuo a nivel físico, emocional, mental y espiritual, para despertar estados mayores de conciencia.
Es una experiencia vivencial corporal inducida por músicas armonizadoras, consignas específicas orientadas a profundizar valores existenciales y danzas inspiradas en arquetipos universales.
El contexto terapéutico grupal con el que trabajamos crea una matriz afectiva que favorece tanto el proceso de sanación individual como el colectivo, transitando por diferentes estados vivenciales, que pueden ser viscerales, físicos, emocionales o mentales, en unión con la vida mediante la orientación de una visión espiritual.
Las escrituras espirituales dice que el hombre viene al mundo terrenal para experimentar. Es el alma que necesita aprender a través de la vida de la persona. Y es la persona la que necesita darse cuenta y contactar con su esencia espiritual para arribar a su destino en la tierra. A través de la experiencia la conciencia se precipita y la vivencia que aflora permite obtener más autoconocimiento de sí mismo.
El método de Psicodanza Integrativa consiste, precisamente, en inducir vivencias que no sean traumáticas, sino reparadoras de situaciones y circunstancias anteriores que dejaron heridas en la persona. Estas lesiones, generalmente, han quedado abiertas o mal curadas desde su origen.
Así como la enfermedad se instala cuando el individuo está expuesto a un ambiente tóxico, agresivo y carente de amor, la salud se refuerza o instala a través de las vivencias del vínculo amoroso de unos con otros, revalorando el sentido del encuentro humano.
Utiliza como herramientas: la meditación, la música, la danza con su sentido simbólico, el grupo y el círculo de palabra que restablecen el vínculo originario con la vida. Podríamos decir que es una terapia corporal vincular integrando el vínculo de amor que se despierta a través de las vivencias que ayudan a expandir la consciencia a niveles dimensionales más allá de la mente.
Es un método transpersonal que transforma la visión de la vida y de uno mismo. Es el despertar de la consciencia del Ser, el Sí mismo como lo llamó Jung.